martes, 28 de octubre de 2008

todas las mañanas
mis ojeras son tan grandes
que sirven de mantel para
mi propio desayuno.

todas las mañanas,
aunque el señor portero
me baldee sin falta la cara
no hay forma de evitar
que me quede dormida
en cualquier abrazo

1 comentario:

Anónimo dijo...

"La belleza no corrompida no es mas que una flor sin pétalos"